¿Qué hacer en caso de elecciones?
Primero que todo, no pierda la calma. Relájese, infórmese, juegue sus cartas. ¿Pero qué cartas? Dadas las condiciones legales de nuestro país, y para no otorgarle poder a los candidatos más infames, sépase Baldizón, Sandra, Jimmy & Co. Lo más sensato en estos casos es NO votar nulo, ni votar en blanco. Hay que votan en contra, por los partidos pequeños si se quiere, tal y como recomiendan en este enlace: http://elperiodico.com.gt/2015/08/30/domingo/hay-que-votar-por-los-partidos-pequenos/
Recordemos que el voto nulo y el voto en blanco en nuestro país (Guatemala por si alguien aún no está del todo seguro) no tienen «validez». Sí, ya sé que #NoQueremosEleccionesEnEstasCondiciones Y estoy consciente de que el acto de voto legitima una democracia suave, ciega, decadente y patética. No obstante, a causa de las condiciones actuales del país y de la movilización ciudadana demandando un estado sin corrupción, considero que hay que participar de manera estratégica, para evitar una catástrofe aun mayor. Sobre este tema también hay un debate abierto que no abordaré acá.
Mi recomendación en estos casos es: investigue. Revise las páginas web de los partidos, identifique puntos positivos y negativos en sus propuestas. Platique con ellos si le es posible o con gente cercana a ellos. Reflexione sobre lo que usted cree, sobre sus convicciones. Revise la trayectoria política de los candidatos. Hoy es muy fácil googlear a alguien y toparnos con su historial de hechos y desechos.
Si ninguno le parece, le sugiero que medite y se pregunte: ¿Acaso vivo bien en este país? Si su respuesta es sí, le aconsejo que vaya a conocer comunidades con muchas necesidades del interior del país en busca de reconciliación consigo mismo, culpa auto-inflingida, tristeza quizá y entienda de una vez por todas que en este país somos muchos los jodidos y que si usted está bien, siéntase dichoso pero agarre onda. Deje de ser un egoísta igual que un político oportunista. Si quiere ver salir adelante a Guatemala, sea coherente y trabaje por un mejor país, tal y como muchos millones lo hacemos. No huya, infórmese y vote.
Si la respuesta es no (pero antes había dicho que sí), entonces, razone su voto. Piense en el candidato que le parezca más lúcido y concuerde mejor con lo que usted espera. Ningún candidato puede cumplir al 100% con sus expectativas, sin embargo, alguien con quien pueda estar de acuerdo en más de un 60% puede ser una opción. Existen herramientas como http://porquienvoto.gt/ en la cual, a través de una serie de preguntas, usted puede guiarse para encontrar un partido afín a sus convicciones políticas. Tampoco crea ciegamente en lo que esta herramienta dice. Si usted es de los inconvencibles, lo invito a platicar con sus amigos politólogos, poetas, intelectuales, gente de izquierda, derecha, arriba y abajo. Lea. Fórmese un criterio, no sea huevón y salga a votar este 6 de septiembre.
Publicado originalmente en
revista EsQuisses
Guatemala, C.A.
Recordemos que el voto nulo y el voto en blanco en nuestro país (Guatemala por si alguien aún no está del todo seguro) no tienen «validez». Sí, ya sé que #NoQueremosEleccionesEnEstasCondiciones Y estoy consciente de que el acto de voto legitima una democracia suave, ciega, decadente y patética. No obstante, a causa de las condiciones actuales del país y de la movilización ciudadana demandando un estado sin corrupción, considero que hay que participar de manera estratégica, para evitar una catástrofe aun mayor. Sobre este tema también hay un debate abierto que no abordaré acá.
Mi recomendación en estos casos es: investigue. Revise las páginas web de los partidos, identifique puntos positivos y negativos en sus propuestas. Platique con ellos si le es posible o con gente cercana a ellos. Reflexione sobre lo que usted cree, sobre sus convicciones. Revise la trayectoria política de los candidatos. Hoy es muy fácil googlear a alguien y toparnos con su historial de hechos y desechos.
Si ninguno le parece, le sugiero que medite y se pregunte: ¿Acaso vivo bien en este país? Si su respuesta es sí, le aconsejo que vaya a conocer comunidades con muchas necesidades del interior del país en busca de reconciliación consigo mismo, culpa auto-inflingida, tristeza quizá y entienda de una vez por todas que en este país somos muchos los jodidos y que si usted está bien, siéntase dichoso pero agarre onda. Deje de ser un egoísta igual que un político oportunista. Si quiere ver salir adelante a Guatemala, sea coherente y trabaje por un mejor país, tal y como muchos millones lo hacemos. No huya, infórmese y vote.
Si la respuesta es no (pero antes había dicho que sí), entonces, razone su voto. Piense en el candidato que le parezca más lúcido y concuerde mejor con lo que usted espera. Ningún candidato puede cumplir al 100% con sus expectativas, sin embargo, alguien con quien pueda estar de acuerdo en más de un 60% puede ser una opción. Existen herramientas como http://porquienvoto.gt/ en la cual, a través de una serie de preguntas, usted puede guiarse para encontrar un partido afín a sus convicciones políticas. Tampoco crea ciegamente en lo que esta herramienta dice. Si usted es de los inconvencibles, lo invito a platicar con sus amigos politólogos, poetas, intelectuales, gente de izquierda, derecha, arriba y abajo. Lea. Fórmese un criterio, no sea huevón y salga a votar este 6 de septiembre.
Publicado originalmente en
revista EsQuisses
Guatemala, C.A.